El mantenimiento y la conservción de inmuebles habitacionales, comerciales o de oficinas  son las acciones que nos permiten evitar el deterioro y conserven su comodidad, funcionalidad y plusvalía.

El mantenimiento  preventivo nos evita sufrir incomodidades y frecuentemente es más económico. Para lograr el mantenimiento preventivo se necesita la observación constante y la intervención oporuna. Otro aspecto importante es que nos asegura mantener vigentes las garantías del trabajo que ya realizamos.

 

Por otro lado, el mantenimiento correctivo se encarga de solucionar los problemas que surgen en el inmueble, que requieren atención inmediata para evitar mayores reparaciones y gastos.

​

En ambos casos es importante contar con un proveedor de servicios que pueda atender todas las áreas de mantenimiento que garantice materiales, mano de obra y costos. Y que a lo largo del tiempo colaboren en el perfecto estado del inmueble.